Page 27 - HOJAS AL VIENTOL
P. 27
www.https://librosargentinos.com/inicio/
por tener a mis hermanos, amigos,
a mi Madre Celestial,
por escuchar mis plegarias,
por estar a mi lado y no dejarme jamás,
por ver el rostro de María
cuando estoy triste, dolorida
y mi tristeza se va,
por extenderme tus brazos
y en ellos descansar.
¡Gracias, Dios mío!
Por todo lo que me das.
PLACER DE VER A MI FAMILIA CUANDO
TODOS NOS JUNTAMOS
Los hijos, yernos y nuera, los nietos que de a uno van llegando,
revoltosos y traviesos, siempre hay uno que toma el mando.
Ver los hijos casados es un sueño realizado.
Son etapas que en nuestra vida van pasando. Ya el patio no es
el mismo donde mis niños jugaban, los vimos alejarse cuando
los años pasaban. Cada uno formó su hogar.
A los padres nos cuesta acostumbrarnos, nos invade la nostal-
gia, es imposible evitarlo.
Después llegaron los nietos… ¡Dios mío cuánto los amamos!
Con su bullicio y juguetes van llenando, llenando los espacios.
Mientras preparo la mesa, las lágrimas me van traicionando,
¿qué más puedo pedir que Dios no me haya dado?
La vida es generosa, me dio cuatro soles, uno soltero y los
otros tres casados.
Nos juntamos los domingos, a veces todo desordenado, pero
reina la unión, después la cena y mucho diálogo. Mañana será
25