Page 24 - RECUERDOS DE UNA PASIÓN

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Arturo Beltramone

Ahí se lo puede observar a la altura de los grandes. Luego con
un problema en la presión de aceite, se retrasa en la cuarta vuelta y
se ubica en el sexto lugar en la clasificación final en la carrera. En el
mes de mayo, con toda la expectativa que generaba para nuestra
zona la carrera de La Pampa, el equipo de los Manzano, se traslada
a General Pico, donde se largaría la novena vuelta de La Pampa.

La Novena Vuelta de la Pampa

El sábado 2 de mayo en una tarde soleada y de temperatura o-
toñal, se reúne en el circuito ubicado cerca del Aero Club de Gral.
Pico, unas 5000 personas se habían reunido para presenciar las
pruebas de clasificación. Dos representantes pampeanos, Cachi
Castaño e Ingaramo, eran los alentados, pero José Manzano que
tenía el record de vuelta del año anterior cuando había logrado el
mejor tiempo, era considerado ídolo en la provincia pampeana,
siendo efusivamente saludado.

Las clasificaciones determinaba el orden de largada del día do-
mingo y tenían mucha importancia. Los circuitos eran mixtos de as-
falto y tierra, era fundamental circular en los primeros lugares ya
que perjudicaba el polvo en la tierra donde no había asfalto.
Por aquellos años era común y legal “el juego de apuestas y re-
mates”, donde se apostaba por el ganador de las competencias. Ese
sábado recaudaron $ 160,000. Los más apostados fueron Cachi Cas-
taña y luego José Manzano con $ 28,000. La recaudación en la clasi-
ficación para 5000 personas que concurrieron, rondó los $360.000,
según comentaba el Diario La Reforma. Había mucha expectativa
por la actuación del Chevrolet de Manzano. Con una brisa fresca, en
un domingo soleado, se largó la competencia el 3 de mayo de 1964,

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