Page 16 - NUESTRO-HIJO-ASPERGER

www.https://librosargentinos.com/inicio/

Su llanto era más bien un suave gemido. A primera hora de
la mañana lo llevamos al pediatra quién pidió inmediatamente
su internación.

Quedó internado en el Hospital Español del Sur
mendocino. Estuvo tres días allí yo permanecí a su lado de día y
mi marido de noche, solo ingresaba a su cuerpo suero, no tomaba
leche, no comía nada. El médico llegó a la conclusión de que el
niño extrañaba su casa y sus cosas por eso no tenían hambre.

Como padres intuíamos que no era como los profesionales
decían, se los hicimos saber pero le dieron, el alta igual. No se
movía solo dormía, de a ratos despertaba pero siempre estaba sin
moverse.

Cuando salíamos de la sala con nuestro hijo en brazos un
médico residente se acercó y nos dio una jeringa grande para que
le diéramos agua, ya que no tomaba ni comía nada. Nos explicó
como teníamos que hacer para darle agua. Nos dijo que le
inclinara la cabeza hacia atrás y le fuéramos dando chorritos de
agua para que pasara por su garganta ya que no tragaba nada.
Lo miré a los ojos, lo escuché atentamente y luego leí el nombre
bordado en color azul en su guardapolvo y decía “Dr. Diez”, le
di las gracias y nos marchamos, era rubio, muy alto y de enormes
ojos azules.

Llegamos con Andrés a casa pensamos que a lo mejor iba a
reaccionar de otra manera, pero pasaron dos o tres días y seguía
en el mismo estado nuestra preocupación aumentaba cada vez

16